El grupo constituye quizás la forma más habitual de convivencia del ser
humano (el grupo de trabajadores, el grupo de amigos, compañeros de estudio,
grupo familiar, etc.). El hombre es un ser social que necesita de otros individuos
para desarrollarse y sobrevivir. Los distintos grupos de los que va a formar
parte, voluntaria o involuntariamente, le van a proporcionar un conjunto de
estímulos y refuerzos necesarios para su desarrollo y su supervivencia, pero a
su vez, de forma implícita o explícita, el grupo va a requerir de sus
integrantes la aceptación de una serie de normas.
¿Qué es un grupo?
¿Por qué las personas
se agrupan?
·
Les gusta la tarea que se realiza
en el grupo.
·
Les gustan los miembros que
pertenecen a ese grupo.
·
Pertenecer a ese grupo es un medio
para lograr otros objetivos personales.
·
Tendencia o necesidad humana de
reunirse y formar grupos.
Los grupos son las unidades fundamentales de una organización, pero los
equipos son las verdadera unidades productivas (Maddux, 1994). Un grupo es más
que un conjunto de personas, que la simple suma de sus integrantes. Para la
OMS, la prevención de enfermedades físicas y mentales no debe enfocar
únicamente a la persona, sino también a los grupos.
El término «capital humano» alude a la saludable confianza que tiene una
población en sí misma, en su interacción y en la actividad cívica en el marco
de las redes sociales. Características de los grupos son (Ferreiro y Calderón,
2006) coincidencia de las personas en un lugar durante un tiempo, tener una
tarea común que posibilite su interacción y la adjudicación y asunción de
funciones, con el agregado de las mutuas representaciones o imágenes internas.
Un grupo muestra en su integridad y unidad rasgos que identifican a cada
uno de los miembros por la influencia mutua, las normas y valores asumidos, el
clima afectivo existente, el tipo de comunicación utilizado, la satisfacción de
necesidades y aspiraciones comunes, además del crecimiento personal
involucrado. Un equipo en cambio es el conjunto de personas que reunidas en un
lugar y tiempo determinados, se ocupan de una tarea que les exige asumir
funciones e interactuar para el logro de una meta. Es un medio por el cual se
obtienen logros comunes pero también se favorece el crecimiento de sus miembros
principalmente en razón del carácter de mutualidad del aprendizaje y del
crecimiento humano.
Los equipos pueden formarse de tres maneras: por una autoridad superior,
al azar o por los mismos participantes. Se identifican siete principios
fundamentales relacionados con la interfuncionalidad requerida por todo trabajo
complejo. Estos son: propósito común, comunicación abierta, procesos eficaces
de trabajo, confianza y respeto mutuo, aprendizaje continuo, toma de decisiones
y compromiso con la institución.